Te voy a ayudar a cambiar la rueda de la bici…


Un padre está para lo que su hijo necesite, y en esta ocasión necesitaba que le echara una mano a la hora de cambiar la rueda de su bicicleta. Su padre no se lo pensó y fue a ayudarle, al fin y al cabo para eso estaba él ahí. Pero lo que el muchacho no sabía en ese momento es que tenía pensado enseñarle algo más que eso. Poco después de empezar se puso detrás de él al estilo «ghost» y comenzó a tocarle poniendo al chico bastante caliente. Tan cachondo lo puso que se levantó y se sacó la polla, por lo que su padre se la comió allí mismo sin que su madre lo supiera. Ella no entraría al garaje, por lo que podían hacer aquello que desearan. Se desnudaron y comenzaron a besar sus cuerpos para disfrutar de ello hasta que finalmente el maduro penetró el culito del chico.