Mirad como me follé al vicioso de mi sobrino


Latino y vicioso, así me gustan a mi los chicos. Que fuera mi propio sobrino supongo que no tenía la mayor importancia, al menos para mi. El muchacho empezó a comerme el rabo, era nuestro vídeo casero y me gustaba como lo hacía, estaba quedando bastante bien. Tras comérmela él supo lo que tenía que hacer, se puso a cuatro patas y perferé su culo. Más tarde se dio la vuelta y mientras me lo follaba podía ver como sus ojos se ponían en blanco del placer, estaba disfrutando de verdad el cabrón. Los dos nos corrimos, yo se lo eché todo encima y luego dejamos de grabar. Para ser nuestro primer vídeo casero estuvo de puta madre.