Se corrió dentro de su apretado culo


Correrse dentro mientras estás follando es sin duda lo mejor de todo, pero no siempre lo permiten. Ellos son dos amigos del gimnasio, de hecho se nota que están fibrosos y musculosos, a pesar de que uno es evidentemente más mayor que el otro. Sin embargo follando son auténticas máquinas sexuales. El más joven le ofrece su culo al maduro para que lo reviente, se lo entrega todo. El hombre disfruta penetrándolo y sintiendo sus nalgas duras y prietas. De hecho a su rabo le costaba entrar, cosa que le estaba excitando demasiado.