Reconoce que esto te gusta…


Por supuesto que le gustaba, llevaba mucho tiempo deseándolo. Era su padrastro, pero eso no significaba nada, le daba igual. Deseaba a ese hombre y por fin era suyo, el maduro había depositado toda su atención en él por fin. Lo desnudó, lo tocó, lo besó… hizo con él todo aquello que tanto le excitaba y con lo que tanto había soñado. Luego lo apoyó sobre la cama y comenzó a meterle los dedos en su culito, el chico se estremecía al sentirlo. Hasta hicieron un 69 en esa postura y pudo probar su polla. Luego se puso sobre aquél hombre y lo penetró, el placer que sintió fue indescriptible.