La fiesta de disfraces acabó con su padre follándoselo a él y a su amigo


Su hijo y el mejor amigo del chico se habían disfrazado para la fiesta, por lo que el padre quiso hacer lo mismo para que se sintieran integrados. El problema para el maduro es que aquello le estaba poniendo muy caliente, cosa que también le sucedió a los muchachos. Al rato su hijo se la estaba comiendo a su amigo, que era más bien su pareja formal. El padre se puso tan cachondo al verlos que no tardó en quitarse la ropa con ánimo de formar parte de aquello. Siempre le habían puesto caliente los jovencitos, por lo que el hecho de que su hijo fuera parte de aquello no le importó en absoluto.