Ejecutivos follando en su mansión


Pretendía simplemente enseñarle su casa, pero la cosa se les fue claramente de las manos. Ambos siempre habían sentido una extraña atracción sexual, fue quitarse uno de ellos la chaqueta y el otro hombre no podía quitarle los ojos de encima. Ambos hombres eran personas de poder, acostumbrados a tratar a la gente como a inferiores. Por eso en caso de follar tenía que ser con un igual. Al final ya te puedes imaginar, empezaron tocándose y con algo de sexo oral. Y, sin quitarse siquiera los trajes, acabaron en el suelo de esa impresionante mansión follando como si fueran dos jovencitos hormonados.