Mi polla es demasiado grande para mi mujer


Dos compañeros de trabajo maduros de vez en cuando se hacen confesiones personales. Uno de ellos le aseguró que su polla era demasiado grande para su esposa, que solía quejarse por ello. Pero a su compañero se le iluminaron los ojos. Siempre había habido algo de tensión sexual, a pesar de que uno de ellos estuviera casado. Pero estar casado no implica que no te gusten los hombres, ¿verdad?. Así que lo que iba a ser una larga jornada de trabajo acabó convirtiéndose en una gran experiencia sexual entre dos amigos.