Mi anciano padre aun se pone duro y me folla


Mientras su padre estaba tumbado en la cama leyendo él se dedicó a hacer otra cosa, que poco tenía que ver con la lectura. Y es que sin que el viejo se inmutase empezó a desabrochar sus pantalones para sacarle la polla. La sorpresa llegó cuando, tras sacarle el rabo, comprobó lo durísimo que estaba. Puede parecer increible que un hombre de su edad y sin «ayuda» consiga una erección más propia de un chico jovencito, pero tal vez el morbo de que le hiciera eso su  hijo consiguió que lograse tal empalmada. Tras aquello se la chupó, el viejo ya dejó su revista de lado y se centró en lo que su hijo le estaba haciendo.