¡Joder!, ¡te juro que soy hetero!


Mientras su mejor amigo y compañero de gimnasio hacía unas flexiones sintió algo diferente al verlo, se excitó. Se había puesto duro y comenzó a tocarse, pero su amigo se percató de lo que estaba sucediendo. Le preguntó que hacía, él le dijo la verdad, se había excitado. Él extrañado le recordó que era hetero, no lo entendía. Pero le hizo ver que tenía ganas de probar, por lo que poco después tenía la boca en su rabo. Nunca se había sentido tan cachondo, mientras le follaba la boca le decía que era hetero, pero eso que sentía poco tenía que ver. Estaba tan caliente que le quitó los pantalones a su amigo, el cual se puso encima y lo penetró.
Al final los dos decidieron ir a la cama para estar más cómodos, desde ese día tuvo claro lo que de verdad le gustaba a él.