en los baños de una disco


A quién no le ha pasado alguna vez el conocer a alguien en una discoteca y sentir unas tremendas ganas de follárselo allí mismo. Pues a este par de jovencitos no sólo les ha pasado si no que lo han llevado a la práctica. Hace apenas unos minutos que se conocen pero sus cuerpos les piden echar un polvo urgentemente. Los baños de la discoteca van a ser testigo fiel de esa pasión encontrada. No les importa que les puedan pillar, eso le añade morbo a la situación.