Este hombre de raza negra era su pareja, y lo había elegido bien desde luego. Era un hombre alto, fuerte y realmente atractivo. Allí mismo en la terraza comenzaron a besarse, a tocarse y por supuesto a desnudarse. Luego le sacó su gran polla negra para comérsela y se quedaron totalmente desnudos. Tras jugar un rato con el sexo oral con besos negros incluidos estaban más que listos para follarse el culo. Entraron dentro de la habitación y preparó su blanco culo para introducirle su gran polla de ébano. Era un hombre tan fuerte que podía follárselo a pulso sin problema alguno metiéndosela hasta el fondo, aunque después fueron a la cama. Allí continuaron con el sexo anal hasta que finalmente su hombre se corrió sobre su culito. Aunque eso si, acabaron besándose como cualquier otra pareja.
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Su hermanastro le ponía cachondo
Le gustaban las pollas negras y grandes
Probando su regalo de cumpleaños
El latino se corrió dentro de él
Es mi hermano, tambien entiende...
Osos musculosos dándose placer anal
Llevaba años esperando esto
Metiéndole la polla hasta el fondo