Mi padre quiso probarme, y lo hizo hasta correrse


Su hijo ya era todo un hombre. Se acababa de vestir para una ocasión importante y llevaba hasta pajarita. La verdad es que estaba muy bueno el cabrón. Su padre lo miraba echado en su cama mientras hacía grandes esfuerzos para que no se notase su gran erección. El chico fue buscando la aprobación paterna, para ver si estaba bien. El hombre se levantó sonriendo y comenzó a hacer como si realmente pretendiera mejorar su aspecto. Pero lo que en realidad pretendía era desnudarlo.